CAROLINE HERSCHEL ( Óscar Cabrera Jiménez y Daniel Pérez Carrasco )

EN SU AFÁN POR APRENDER
Contó con el apoyo de su padre.
Tuvo la oposición de su madre, ya que consideraba poco femenina toda ocupación que involucrase el pensamiento.
Su padre empezó a hacer a Caroline partícipe de sus pensamientos.
Realizaba sus estudios con su hermano William.
¡¡POCO IMAGINABA CAROLINE QUE SE CONVERTIRÍA EN LA PRIMERA MUJER EN LA HISTORIA EN DESCUBRIR UN COMETA!!

CUANDO LLEGÓ LA GUERRA
Su padre se marchó a la guerra.
Su hermano emigró a Inglaterra como músico.
Caroline quedó bajo la tutela de su madre, la cual le impidió realizar sus estudios astronómicos.

VIDA
Contrajo el tifus a los 10 años, lo que le impidió contraer matrimonio.
Su hermano decidió llevársela consigo a Inglaterra, para que se ocupara de su casa.


DESCUBRIMIENTOS DE CAROLINE
Comenzó a hacer sus primeros descubrimientos de nebulosas.
Descubrió su primer cometa en 1786, que le valió el reconocimiento de las autoridades científicas.
Continuó durante años su labor de catalogación de nebulosas.
Además de esto, descubrió 8 cometas entre 1786 y 1797.
Después se dedicó a revisar y ordenar el catálogo estelar de John Flamsteed.
En 1798 envió a la Royal Astronomical Society su Índice de observaciones de Estrellas Fijas de Flamsteed, con una lista de 560 estrellas que éste había omitido.


DESCUBRIMIENTOS DE WILLIAM
Descubrió Urano.
Elaboró un catálogo que incluía nebulosas, galaxias y espirales descubiertos por su hermana Caroline.

RECONOCIMIENTOS
En 1828 le fue concedida la medalla de oro de la Royal Astronomical Society de Inglaterra, por su catálogo de 2500 objetos de cielo profundo.
En 1835, cuando contaba 85 años, recibió el nombramiento de mienbro honorario de la Royal Astronomical Society.
Junto con la también matemática y astrónoma Mary Somerville, fue la primera mujer en ingresar en dicha Academia (Royal Astronomical Society).
Tres años más tarde fue miembro de la Royal Irish Academy.
En 1846, con motivo de su nonagésimo sexto cumpleaños, el rey de Prusia le otorgó la Medalla de Oro de la Ciencia.
Caroline Herschel vivió 98 años, conservando hasta entonces una salud física y mental fuera de lo común
Posteriormente, en 1889, fue bautizado en su honor el asteroide Lucretia (segundo nombre de Caroline), y en el siglo pasado, el cráter lunar C. Herschel, al borde del Mare Imbrium.